Los contratos de concesión bajo la modalidad de APP incluyen, además de los métodos de solución de controversias tradicionales como el arbitraje nacional e internacional, la posibilidad de acudir a un panel de amigables componedores para resolver controversias puntuales. A través de la amigable composición, dos o más partes difieren la decisión de una controversia a un tercero, cuya resolución, vinculante para ellas, adopta la forma de un contrato. Esta figura funciona como medio de solución de conflictos informal, escasamente reglado, en donde la voluntad de las partes se convierte en su principal fuente de procedimiento. Es importante resaltar que, en este caso, el único límite a la autonomía dispositiva de las partes es el respeto a la igualdad, así como la posibilidad de aportar y controvertir pruebas y argumentos jurídicos.  El artículo 61 del Estatuto Arbitral, por ejemplo, regula aquellos aspectos relevantes ante el silencio de las partes, previendo que en caso de que éstas no lo pacten expresamente, el amigable componedor será solo uno. Ahora bien, los contratos de concesión bajo la modalidad de APP para proyectos de infraestructura 4G incluyen provisiones sobre amigable composición, como mecanismo de solución de controversias contractuales. A pesar de esto, la aplicación de este mecanismo no es apta para todas las controversias. A diferencia de las cláusulas arbitrales pactadas, la amigable composición no se extiende a todas las controversias u obligaciones contractuales, sino a aquellas previstas de manera específica dentro de un contrato: si la controversia entre las partes no se encuentra específicamente diferida a la amigable composición en una cláusula contractual especial, ésta no será aplicable. Los amigables componedores aquí se nombran de manera anticipada al surgimiento de la controversia. Cada contrato 4G tiene un panel permanente de amigables componedores, actualizado con cierta periodicidad, que debe estar disponible cada vez que cualquiera de las partes quiera hacer uso de este mecanismo. La remuneración de estos componedores se hace a través de la subcuenta MASC que hace parte del patrimonio autónomo que administra los recursos del proyecto. Ya en este escenario, el amigable componedor sólo está facultado para interpretar el contrato, más no a modificarlo, subrogarlo o tomar cualquier otra medida que implique el cambio de condiciones contractuales. El panel tampoco podrá pronunciarse sobre las facultades exorbitantes de la entidad. Cabe resaltar que en algunos proyectos se ha pactado que la decisión de los amigables componedores sea vinculante, únicamente cuando sea adoptada de manera unánime. Recuerde seguirnos en  Twitter y LinkedIn. © Lloreda Camacho & Co. Derechos de Autor Reservados. Prohibida su reproducción. Autor: Camilo Valenzuela